02/05/1629:
En
varias ocasiones hemos tratado sobre las intentonas de reformar las fiestas de
San Juan debido a las irreverencias cometidas por los sorianos en estos días y
por el enorme gasto que les suponía y que les llevaba a muchos a tener que
pedir préstamos o adquirir compromisos a los que podían hacer frente. Esos
intentos trataban de ser impuestos por la autoridad civil o eclesiástica desde
el exterior. Por ello resulta muy sorprendente que un nuevo intento de
reducción de las fiestas de San Juan para evitar que los sorianos se arruinasen
y, en particular los mayordomos de cuadrilla que estaban obligados a dotar la
fiesta, se realizara por los propios sorianos. De este asunto se trató en la
correspondiente Junta General del Común de Vecinos pecheros de Soria un día
como hoy del año 1629.
En esa jornada se propuso reducir los
festejos y mantener únicamente el festejo de las Calderas con su
correspondiente romería a Nuestra Señora de la Blanca con procesión, misa y
caldera de caridad sólo para las pobres consistente únicamente en la entrega de
pan y vino por parte de los mayordomos de cada cuadrilla, sin comidas
comunitarias ni corrida de novillos.
Como no puede ser menos el asunto causó un
gran controversia entre los vecinos y en la posterior asamblea celebrada unos
días después para tratar del asunto ni siquiera asistieron más que trece cuadrillas
de las que tras la correspondiente votación, ocho estuvieron a favor de
mantener la fiesta «como ha sido costumbre»,
tres votaron por limitarlas según lo propuesto y dos se abstuvieron a
favor de la mayoría.
Prueba de la autoridad un Domingo de
Calderas en la cuadrilla de San Blas. Fotografía de José Alfonsetti fechada hacia
1905 y publicada en la revista ilustrad Fiestas de San Juan.
No hay comentarios:
Publicar un comentario