Junta Suprema Gubernativa y Militar de Soria

09/06/1808: A primeros de junio las noticias de que José, el hermano de Napoleón, había sido coronado rey de España llegaron hasta Soria causando una gran incertidumbre ante la que el concejo soriano reaccionó negándose a aceptar ese nombramiento. Se  designaron una serie de representantes de la ciudad para constituir una Junta Suprema Gubernativa y Militar que asegurase el orden dado que la guarnición militar con que contaba habitualmente la ciudad había partido dejando la ciudad desprotegida pese a sus defensas: un castillo arruinado pero aún casi inexpugnable y la muralla.

En esta situación, el 9 de junio, el Ayuntamiento recibió un oficio del Capitán General de Castilla la Vieja, don Gregorio de la Cuesta, en el que urgía a que en cada una de las provincias se anulasen las juntas que pudiera existir y se constituyera una única Junta de Armamento y Defensa. En principio los vecinos desconfiaron de lo que consideraban una intromisión impuesta, jerarquizada y oficialista por parte de unos militares que no se tenía claro a qué intereses obedecían. Pero obedecieron y constituyeron una nueva Junta Militar formada por vecinos de todos los estamentos sociales entre los que estaban por ejemplo el abad de la colegiata de San Pedro.

Esta decisión de constituir juntas militares provinciales creadas al amparo de las milicias permitió una mejor coordinación de los recursos humanos y materiales. Pero el carácter individualista de los españoles hizo que muchos voluntarios se negaran a participar bajo una bandera común, circunstancia que los franceses aprovecharon para invadir rápidamente el país. Es probable que de haberse coordinado mejor desde el principio la Guerra de la Independencia hubiese sido mucho más breve. Y es que la unión hace la fuerza.

Plaza Mayor de la ciudad donde quedó construida la Junta Suprema Gubernativa y Militar de Soria.