Isabel Rebollo fue la viuda del licenciado Andrés de Calderón, un caballero perteneciente al linaje soriano de los don Vela que fue el primer corregidor de Granada tras la victoria de los Reyes Católicos. El matrimonio, que disfrutaba algo más que de una situación desahogada, no tenía hijos por lo que en esta fecha Isabel firmó su testamento en el que dispuso donar su casa particular en Soria para que allí se fundase un hospital destinado a atender pobres y las rentas necesarias para su mantenimiento, una indispensable instalación de la que la ciudad carecía.
El hospital
se instaló en la casa familiar ubicada junto a la iglesia de santo Tomé y cerca
de la Puerta del Rosario. Tenía una capacidad de 18 camas y su gestión le fue
encomendada a la cofradía de San Andrés que elaboró, en 1514, unas primeras
ordenanzas aprobadas por el obispo Alonso Enríquez y que fueron alteradas en
parte. En 1806, el obispo José Antonio Garnica mandó redactar otras ordenanzas
y fueron aprobadas definitivamente veinte años después por los miembros de la
cofradía.
Durante la
Guerra de la Independencia el
edificio fue destinado a cuartel militar y expoliado pero, siguiendo órdenes,
fue destruido por los españoles al finalizar la contienda para evitar que si
los franceses regresaban se hicieran fuertes allí, trasladándose el hospital al
convento de La Merced. El viejo hospital se reconstruyó y que quedó como simple
capilla hasta un momento indeterminado de los primeros años del siglo XX,
cuando fue derribado.
Actualmente su
solar lo ocupa el edificio donde se encuentra el comercio Almacenes Barcelona.
Dibujo de Santo Domingo hacia 1910 con la capilla del hospital, realizado por Eutiquio Delgado y recogido en Revista de Soria nº 24 (1999). |
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