miércoles, 12 de febrero de 2020

12/02/1925: El final del proceso de las pinturas de San Baudelio.

Hace 95 años se puso un triste final a una de los menoscabos patrimoniales que más nos han dolido a los sorianos: la pérdida de los frescos de la capilla de San Baudelio de Casillas de Berlanga.

            Aunque una Real Orden de 1917 declaró Monumento Nacional a la ermita, entonces sin culto y en manos privadas, en 1922, un traficante de obras de arte compró a los dueños las pinturas murales que la decoraban por 50.000 pesetas (300 euros). Cuando los obreros especializados vinieron a arrancarlas, la Guardia Civil sospechó sobre la legalidad de la venta y dio aviso a la Comisión de Monumentos de Soria que intentó detener el proceso acudiendo a los tribunales. Sin embargo, y pese a disfrutar de la categoría de Monumento Nacional, la legislación sobre protección del patrimonio artístico y cultural que había entonces no pudo evitar que tal día como hoy, de 1925, el Tribunal Supremo declarase la venta conforme a derecho y diera la razón a los propietarios que inmediatamente las vendieron. Esta venta propició que, hoy, la mayor parte de ellas estén expuestas en museos de los Estados Unidos de América. Más tarde, unas pocas regresaron a España y se exponen en el Museo del Prado. Y, desde este museo, algunos fragmentos pudieron reintegrase a su emplazamiento original del que nunca debieron salir.

Aquel suceso hoy sería inconcebible y nos rasgaríamos las vestiduras pero, seamos sinceros, ¿qué habríamos hecho cualquiera de nosotros si, a cambio de algo que apenas valorábamos, nos ofrecieran mucho dinero que necesitáramos? Pero, no nos pongamos en una situación tan extrema. ¿Qué hacemos los sorianos para evitar que los frescos de San Saturio se deterioren cada vez más; para que La Monjía de Fuentetoba no se hunda; para impedir que desaparezca el castillo de Serón;…?

Fragmento del fresco del camello procedente de San Baudelio, expuesto en un museo de Nueva York.
Foto: Colección particular.


No hay comentarios:

Publicar un comentario