lunes, 9 de mayo de 2016

09/05/1992: En esta fecha se inició el proceso de canonización de quien fue monja profesa en el convento de Clarisas de Soria: sor Clara Sánchez.

Sor Clara, cuyo nombre seglar fue el de Juana de la Concepción Sánchez García, nació en Torre de Cameros (La Rioja) el 14 de febrero de 1902, en el seno de la familia del que fue maestro y secretario del pueblo. Con dos años de edad su padre se trasladó a la localidad soriana de Rebollar y aquí se trajo la familia. De Rebollar pasó a vivir en la capital mientras cursó los estudios de Magisterio. Carrera que no llegaría a desempeñar ya que, en 1923, Juana decidió tomar los votos de las monjas clarisas e ingresó en el monasterio soriano cambiando su nombre por el de Clara. Allí llegó a ser abadesa y desarrolló una meritoria vida de humildad y oración que le hizo merecedora de la fama de la santidad. Sus hermanas Clarisas la recuerdan con cariño pero también muchos sorianos de la calle que acudían al locutorio de Santo Domingo para entrevistarse con ella, pues tenía fama de ser buena consejera.

Tras cincuenta años de vida monacal sor Clara falleció de un infarto el 22 de enero de 1973 con gran pena de sus hermanas y de muchos sorianos que convencidos de que había muerto una santa fueron a despedirse de ella. Como es habitual, fue enterrada en el mismo cementerio del convento. Unos años después, en 1982 y ante la necesidad de disponer de espacio las monjas Clarisas procedieron a exhumar sus restos para reaprovechar la sepultura pero se encontraron con la sorpresa de que su cuerpo apareció incorrupto.

No es que la incorruptibilidad sea exclusiva de la santidad pues aunque poco usual, sobre todo en aquel cementerio tan húmedo, es un fenómeno que suele suceder de vez en cuando. Pero la comunidad  clarisa entendió que esa era la prueba que necesitaban para justificar que tan virtuosa monja subiera a los altares por lo que de inmediato y tutelados por los padres franciscanos iniciaron los trámites pertinentes de beatificación ante la Sagrada Congregación Vaticana para la Canonización de los Santos cuyo proceso se abrió el 9 de mayo de 1992.

Hoy los restos de la madre Clara se encuentran depositados en una capilla de la iglesia esperando el reconocimiento de que se le atribuya algún milagro y que haga que el largo proceso no se alargue demasiado.


Retrato de juventud de sor Clara Sánchez.

Fotografía proporcionada por una seguidora de este foro y devota suya.

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